LOS AMIGOS DE BUSH
The disturbing ties of some of
George W. Bush’s Latino advisors Tomado integramente del trabajo de Julie Reynolds, Universidad de California, Campus Berkeley
Los vínculos oscuros de los amigos
latinos de George W. Bush
"Dime con quién andas y te diré
quién eres"
Por Julie Reynolds (
www.elandar.com)
Asistencia de investigación de Víctor Almazán y Ana Leonor Rojo ELENCO Los amigos de los amigos George Bush Jr., amigo y aliado de Ernesto Ancira Jr. y Roy Barrera Sr. Ernesto Ancira Jr. Amigo de George y Laura Bush, Co-Presidente del Consejo Adelante con Bush. Los Bush, tanto el senior como el junior hicieron campaña para él en las elecciones de 1992 para el Senado del Estado. Pertenece al Consejo Administrativo del fraccionamiento Dominion. Amigo y/o asociado de Guillermo Ávila, Gus García y Roy Barrera Jr., y primo de Alonso Ancira. Roy Barrera Jr. Líder del Partido Republicano en San Antonio, Texas, Adelante con Bush (Sr.), El equipo de los 100, que hace campaña para George W. y se dice que es aspirante al gabinete. Clientes de los Barrera relacionados con los cárteles: Guillermo Ávila Encontrado culpable de lavado de dinero para el cártel de Juárez. Juan Chapa Encontrado culpable de tráfico de cocaína, cárteles de Juárez y del Golfo. Mario Alberto Salinas Treviño El FBI lo relaciona al asesinato en 1985 del agente de la DEA, Enrique Camarena. Encontrado culpable de transportar cocaína del cártel de Caro Quintero. Enrique Fuentes León Abogado del cártel del Golfo, vinculado a los asesinatos de Ruiz Massieu y Colosio. Encontrado culpable de soborno, actualmente encarcelado en México en conexión con el asesinato de Nely Campobello. Tiene una orden de aprehensión en los Estados Unidos por intento de soborno. Los vínculos oscuros de los amigos latinos de George W. Bush Guillermo Ávila CONVICTO por lavado de dinero del cártel de Juárez y ligado con Rafael Muñoz Talavera (foto abajo). Fue parte del Consejo de El Dominion y amigo de Ernesto Ancira y Gus García. Enrique Fuentes León Abogado del cártel del Golfo, CONVICTO por soborno, socio de Planeta México con Rogelio Gasca Jr., dueño del terreno más grande en El Dominion. Parte de esta propiedad fue vendida a Image Homes, Ltd, quién a su vez la vendió a Cresent Real Estate, compañía en la que George W. Bush tiene dinero invertido. (Más en el recuadro de Roy Barrera Jr.) Ligado en el asesinato de José Francisco Ruiz Massieu. Manuel Muñoz Rocha FUGITIVO buscado en conexión con el asesinato del político mexicano del PRI, José Francisco Ruiz Massieu. Se le pagaron $500,000 por medio de un cheque con cargo al Bank Audi en Ginebra. Visto por última vez en San Antonio con Enrique Fuentes León. Manuel Pacheco Admitió haber lavado dinero, encontrado culpable. Socio del Planeta México con Enrique Fuentes León. Gary Jacobs Presidente del Laredo National Bank, propiedad de Carlos Hank Rhon y Carlos Hank Gonzáles. Donó $61,000 a George W. Bush. En otro caso fue multado a principios de este año por5 la FEC por haber violado leyes financieras de campaña. Carlos Hank González (ya fallecido) y su hijo Carlos Hank Rhon Conocido como el creador de reyes del PRI, el dinosaurio del Partido. Su familia ha sido investigada por vínculos con el cartel, asesinato y lavado de dinero. No ha sido acusado formalmente. Gus García Investigado por tráfico de cocaína y lavado de dinero. No ha sido acusado formalmente. Socio en algunos negocios de Anuar Name, su edificio en San Antonio fue comprado por 5 millones de dólares en efectivo y refinanciado por el AudiBank Anuar Name Se reporta en los medios y por investigaciones como socio de Emilio Checa Curi, fugitivo investigado por sus vínculos con los cárteles de Sinaloa y Guadalajara. Mario Villanueva Ex gobernador de Quintana Roo, relacionado por las autoridades por sus vínculos con el cartel de Juárez. Adnan Kasshoghi Traficante internacional de armas, involucrado en el escándalo Irán Contra. Joseph Audi De la familia libanesa Audi, director general y socio del Bank Audi, New York. Raúl Salinas Encontrado culpable de haber sido el autor intelectual del asesinato de Ruiz Massieu (ver el recuadro de Raúl Salinas) Ex presidente Carlos Salinas de Gortari Ampliamente acusado en la prensa mexicana de corrupción y vínculos con el cártel del Golfo. No hay cargos formales en su contra. Ahora se encuentra autoexiliado en Irlanda y/o en Cuba. Fue durante ese tiempo que Ernesto Ancira y sus primos empezaron a invertir en bienes raíces de lujo, y los otros, grupo selecto industrial de mexicanos, se unieron a él. Ernesto entró al nuevo fraccionamiento con campos de golf y totalmente cercado al norte de San Antonio, El Dominion donde Guillermo Ávila una vez tomó parte del Consejo y Ernie aún lo es. Detrás del imponente arco de piedra los vecinos de la familia Ancira, son crema y nata de la estructura de poder corporativo y de gobierno en México. Los Zambrano Treviño, de la gigantesca empresa de cementos CEMEX, compraron propiedades ahí, tal como lo hizo el dirigente de la Asociación de Hoteles y Moteles de México y media docena más de gente poderosa. Muchos de ellos pagaron en efectivo, incluyendo a Rodolfo Zedillo, hermano del entonces nuevo presidente de México, Ernesto Zedillo quién compró una casa que pagó en efectivo en octubre de 1994 justo cuando iniciaba convenios por 8 millones de dólares en negocios fundados por el cártel de Juárez. (Turín Court No.6, SAT 78257-1644) Sin embargo, el terreno con mayor extensión en El Dominion, fue comprado por Enrique Fuentes León, un fugitivo de la justicia mexicana por sobornar jueces en representación de un rico playboy de Acapulco, quién violó, torturó y mató a una niña de seis años de edad. Fuentes León se fugó a Chile y después a Argentina de donde se vino a Texas con una visa de inversionista. Y efectivamente invirtió. Fuentes León compró más de 100 acres en El Dominion a principios de los noventa y muy pronto adquirió más de seis millones de dólares en bienes raíces en San Antonio. La DEA empezó a fijarse en él, según reportes de la misma agencia, cuando representó al capo del cártel del Golfo, Juan García Abrego, en un juicio en Matamoros, México. A pesar de que aún era buscado en México, de alguna manera Fuentes León viajaba dentro y fuera del país con frecuencia usando pasaportes mexicanos nuevos. Un investigador de las autoridades a cargo del arresto de Fuentes León me dijo que Ancira, algunas veces, llevaba a Fuentes León en su avión privado, pero Ancira lo negó y dijo no conocerlo. La investigación continuó. En 1993, Fuentes León y un grupo de inversionistas trataron de comprar el periódico San Antonio Light, pero la Hearst Corporation _o tal vez el Departamento de Justicia que usualmente está al pendiente de la venta de periódicos importantes- nunca aceptó las ofertas. Fuentes León compró la popular discoteca Planeta México que pertenecía a un amigo de Ancira que estaba en el sector de energía, Rogelio Gasca Jr. Un nuevo socio, Manuel Pacheco, entró al negocio de la discoteca pero poco después fue arrestado por lavado de dinero. Actualmente purga una condena de 15 años en prisión. Con su visa a punto de expirar, Fuentes León hizo infructuosas súplicas a los altos y poderosos de América, incluyendo a George W. Bush, quién llamó a su padre, el Presidente, en representación de Fuentes León (ver El Andar, invierno del 99). Fuentes León, finalmente fue arrestado y estaban listos para ser presentados los cargos por soborno y lavado de dinero proveniente de las drogas. Los Barrera tomaron el caso En la audiencia se puso una cinta grabada en la que Fuentes León se las arreglaba para sobornar a un agente de Inmigración encubierto. La cinta se grabó durante el verano de 1994 unos meses después del asesinato del candidato a la presidencia de México, Luis Donaldo Colosio. Fuentes León presumía que su hijo Enrique, también abogado, "era de la gente de Zedillo". En un momento de valentía, Fuentes León le dijo al agente de Inmigración "yo sé cómo mataron a Colosio" y dijo algo aún más escalofriante: "Al final, en agosto van a haber más muertos y todas esas cosas, ¿eh? Van a haber más muertes". Y así fue: José Francisco Ruiz Massieu, el gobernador de Guerrero que quería que Fuentes León enfrentara cargos en México, fue asesinado poco después. El columnista de El Financiero, Jorge Fernández, reportó que Ruiz Massieu estaba programado a ser asesinado en agosto, pero debido a un problema con uno de los que iban a ejecutarlo, el evento dio lugar en septiembre. Raúl Salinas, el hermano del presidente, con el tiempo fue encontrado culpable de haber sido el autor intelectual del asesinato. Agentes del Servicio de Inmigración y Naturalización de Estados Unidos (INS) insistieron que otro hombre, buscado por haber orquestado u organizado la logística del asesinato, estuvo con Fuentes León momentos antes de su arresto en San Antonio. Ese hombre, Manuel Muñoz Rocha, simplemente se libró de ser arrestado porque en el momento los agentes no sabían que él era un fugitivo con una recompensa de un millón de dólares por su cabeza. El oficial de Inmigración a cargo del arresto Gray Renick dice que los tres agentes que estuvieron presentes, de manera separada identificaron a Muñoz Rocha en fotografías. Ahora jubilado, Renick aún dice que Muñoz Rocha estaba presente en el momento del arresto de Fuentes León. Una empleada de Fuentes León, testificó que ella escuchó a su jefe hablar con un hombre quien ella estaba segura era el amigo de Ernesto Ancira, Gustavo García, justo pocos días después de que ocurrió el asesinato. La empleada dijo que ella cree que escuchó a los hombres hablar sobre el asesinato y que ella está segura que dijeron que necesitaba más dinero para Muñoz. La DEA -según se reporta- encontró que un alto funcionario de la misma DEA que estaba en la nómina del Cartel del Golfo, se reunió con Fuentes León y Muñoz Rocha en una "ciudad en los Estados Unidos" pocas semanas antes del asesinato. Y un reporte del FBI hizo notar que uno de los testigos le dijo a los agentes que Fuentes León "tiene mucha información sobre Ruiz Massieu" Manuel Muñoz Rocha desapareció en el momento mismo del arresto de Fuentes León y no se le ha vuelto a ver oficialmente, sin embargo, hay una nota curiosa de su permanencia en San Antonio: La visa de Muñoz Rocha, la que usó para entrar y salir de los Estados Unidos unas semanas antes y después del asesinato de Ruiz Massieu, mostraba una dirección ambigua: "El Dominion, San Antonio". Gus García: El tercer hombre Con el tercer miembro de la troika de Ancira, el empresario Gustavo García, el grupo texano se convirtió en una operación multinacional. García había estado bajo investigación de la DEA por tráfico de cocaína en Florida y Venezuela y por la policía local por lavado de dinero en San Antonio. No hay cargos formales en su contra. García encabeza la franquicia francesa Brita de purificación de agua en México y es dueño de alrededor de cien millones de dólares en bienes raíces en San Antonio, junto con su socio, el empresario libanés-mexicano Anuar Name. La única señal visible de la presencia de Name en San Antonio es la resplandeciente torre de oficinas que junto con Gus García posee. García, durante varios años trató de comprar el impresionante edificio pero no podía conseguir el dinero. Después, tras un largo viaje a México, regresó victorioso representando a Anuar Name, un hombre de negocios que con varios millones de dólares había financiado la campaña de Salinas. Name también tenía manchas en su reputación pero ninguno de los dos eran bien conocidos. Los periódicos reportaron que Name tenía una discoteca en Tijuana junto con un miembro de cártel de droga de Caro Quintero, de Sonora. Name está asociado con Adnan Khashoggi, un traficante de armas egipcio, amigo de Raúl Salinas y socio del creador de reyes del PRI, Carlos Hank González, cuya familia ha estado investigada en los Estados Unidos, Costa Rica y México por vínculos con cárteles de drogas, asesinato y lavado de dinero (ver El Andar del verano-otoño del 99) García compró el edificio Mercantil a nombre de Anuar Name en febrero de 1992 por 5 millones de dólares ¡en efectivo!. _Tengo algunos inquilinos importantes que lo están viendo_, García les dijo a los reporteros. Poco después, los amigos de Name, la familia Hank, rentó la planta baja en donde instalaron el Laredo National Bank de Carlos Hank Jr. En ese mismo edificio, Ernesto Ancira instaló su casa de campaña para Senador estatal de Texas en 1992. El círculo de Anuar Name también incluye a Joseph Audi, del Banco Libanés Audi (Lebanese Bank Audi), un _banco privado y personal_ con sucursales en Beirut, Ginebra, París, Luxemburgo y Nueva York, involucrado en un escándalo multimillonario de tráfico de armas y lavado de dinero. No hubo cargos formales contra el banco, sin embargo, se congeló una cuenta de seis millones de dólares y a uno de sus depositantes se le acusó de tráfico de armas y lavado de dinero. A finales de 1993 y principios de 1994, Name y García refinanciaron su edificio de San Antonio varias veces (por uno a cinco millones de dólares cada vez) de la cual una gran parte provino del amigable banquero, vecino de Name, Bank Audi. Sin embargo, el Bank Audi merece que se le de un mayor crédito: Su sucursal en Ginebra fue el banco que expidió un pago de $599,985 (dólares) que pasó por varios bancos hasta que llegó a una cuenta que pertenecía a Manuel Muñoz Rocha y a un matón, encontrado culpable en el asesinato de José Francisco Ruiz Massieu. Los investigadores nunca han podido determinar quién era el dueño de la cuenta original en el Bank Audi. Los Amigos de Bush Ernie y Roy Barrera promovieron la campaña del Presidente Bush en 1992 y celebraron lo que parecía ser una fácil reelección con George W. en un "súper martes" para las primarias de Texas. Ancira también pensó que él era el llamado a la candidatura para el Senado Estatal, especialmente cuando ambos Bush salieron a promover su campaña. George W., de una manera optimista saludó a Ernie como “Sr. Senador” mucho antes de que tuvieran lugar las elecciones. Pero Ernesto y el Presidente Bush fueron derrotados el mismo deprimente día de noviembre de 1992. _Ancira perdió el Senado del Estado y Bush la Presidencia de los Estados Unidos. 1994 fue un año turbulento para el Grupo Texano. Las cosas sucedieron rápidamente y de manera tan dramática que la escena fue brutal e intoxicante. El TLC (NAFTA), la joya de la corona de todos los involucrados, desde Salinas a los Bush, Mosbacher y Ancira, se hizo una realidad el primero de enero. El mismo día, los rebeldes zapatistas declararon la guerra al gobierno mexicano seguido de masacres y un fuerte clamor internacional. Ya en el otoño, México había sufrido los asesinatos de Colosio y Ruiz Massieu. Ernesto Zedillo -un graduado de Yale, como los Bush- fue elegido Presidente. Entonces el peso se desplomó. Por fortuna la mayoría de la clase adinerada de México ya había puesto su dinero en inversiones en dólares, tales como bienes raíces en San Antonio, por lo tanto las cosas se veían bien, especialmente después que George W fue elegido como Gobernador de Texas. La campaña de Bush para gobernador fue sencilla. Los _Amigos de Bush_, -el grupo de apoyo latino- trabajaron arduamente. La gente de Bush se mostró eufórica porque ya habían obtenido el 29% del voto latino, aproximándose al récord de 38% que obtuvo Roy Barrera durante su postulación para Procurador General del Estado. En aquella carrera electoral de 1986 los dos Bush apoyaron a Barrera organizando barbacoas y eventos especiales para recaudar fondos para _Voy con Roy_. En 1994 Roy, feliz de la vida, celebró la victoria de George W., especialmente por su participación en el voto hispano. Después de todo, Roy y los _amigos_ le ayudaron a ganar. Ancira, otro _Amigo de Bush_, se sentía muy bien también pues fue premiado con dos nombramientos: el primero fue pertenecer a la Barra de Compensación al Trabajador del Estado de Texas y después al ambicioso puesto en el Consejo de la Escuela de Comercio de la Universidad de Texas. James Leininger, un influyente amigo de George W. Le dio a Ernie un puesto en el Consejo de Texas Public Policy Foundation. Casi de inmediato, el gobernador Bush tuvo que afrontar un problema presentado por los primos mexicanos de Ernesto. Los Ancira habían unido esfuerzos con un antiguo amigo de la escuela, el heredero farmacéutico, Xavier Autrey, durante la apertura de privatizaciones del presidente Salinas, a finales de la década de los 80. Estos astutos muchachos manejaron seis millones de dólares de dinero ajeno convirtiéndolos en miles de millones, comprando compañías mineras y energéticas al igual que la compañía acerera más grande de México, Altos Hornos de México (AHMSA). Al poco tiempo sus compañías fueron acusadas de ser los frentes del tráfico de drogas y así fueron calificadas por el analista R. C. Whalen en una audiencia congresional estadounidense en 1993. En una operación de explotación minera secreta, llamada Dos Repúblicas, los Ancira trataron de poner en operación un negocio de energía Tex-Mex al tratar de arreglar una planta semidestruida de carbón en la frontera, llamada Carbón II. Convencieron al World Bank, Citibank y Southem California Edison para que invirtieran más de 250 millones de dólares en el proyecto. ¡Fue un desastre! La reputación de los Ancira se hundió tan rápido como una cubeta corroída por el óxido y los inversionistas empezaron a buscar formas para salirse. Los accionistas acusaron a la familia Ancira de desperdiciar cantidades extraordinarias de dinero en jets corporativos, limusinas y otros lujos, sin mencionar sus extensas compras de bienes raíces en San Antonio. Sólo el año pasado cuando la compañía acumuló casi dos mil millones de dólares en deudas y tuvo que suspender los pagos, los Ancira empezaron a mover títulos de propiedades de una manera silenciosa a compañías controladoras (holding) en las Islas Caimán con la ayuda de quién aparecía al frente de las empresas, Marcelo Sánchez. Carbón II debió haber sido el tipo de proyecto que el gobernador Bush hubiera adoptado: Una empresa energética modelo entre México y los Estados Unidos, sin embargo, las quejas de los ecologistas con respecto a la contaminación del medio ambiente, se tornaron más severas y los comentarios de Bush se hicieron más defensivos. Cuando el proyecto finalmente se derrumbó en 1995 debido al mal manejo y al hecho que la aprobación de Salinas había sido descaradamente ilegal, a Bush le fue dado el crédito por considerar los intereses de la ecología. Para cuando llegó el momento de su reelección en 1998, George W. -se dice- ya estaba trabajando en su candidatura para la Casa Blanca y, en Texas, una vez más contó con el voto latino. También se estaba trabajando para fortalecer los lazos energéticos con México. Ese otoño dio una conferencia de prensa en conjunto con el Secretario de Energía de México, Luis Téllez. Ambos prometieron una nueva era en la que Texas y México esencialmente borrarían la frontera y crearían un _mercado común_ para la producción de gas y electricidad y su consumo, al igual que un tendido eléctrico integrado. Un mes después con la ayuda de los _Amigos de Bush_, George W. superó el récord de Roy Barrera y obtuvo un fuerte 39/49% del voto latino. Ganó abrumadoramente y desde entonces ya estaba contando con la nominación presidencial republicana. Aún Corriendo Con Lobos Ha sido un paseo salvaje desde la cena en la Casa Blanca en 1989. Bush Sr. Perdió la Presidencia y junto con su esposa Barbara ahora promueven la campaña para su hijo. Carlos Salinas se auto exilió en Irlanda y/o Cuba, su hermano Raúl se encuentra en prisión. Este año, Roy Barrera Jr. está dentro de la campaña de George W. y ha hecho _aspavientos_, dicen los periódicos, para contender en las próximas elecciones para gobernador de Texas, pero la sombra de sus relaciones pasadas, continúa persiguiéndolo. El año pasado, Barrera Jr. se metió en aprietos. Representó al millonario Allan Blackthome después del asesinato "por contrato" de la ex esposa de Blackthome, Sheila Bellush. El caso llegó a los encabezados nacionales porque Bellush fue asesinada a puñaladas frente a sus cuatrillizos que estuvieron gateando sobre la sangre de su madre hasta que fueron encontrados. El asesino, José Del Toro huyó a México y fue representado por nada menos que por el antiguo cliente de Barrera, el del cártel del Golfo, el prestigioso buffet de Enrique Fuentes León. Barrera fue despedido como el abogado de Blackthome y el Departamento de Justicia de los Estados Unidos inició una investigación para determinar quién pagó los supuestos altos costos legales de Del Toro en México. Del Toro dijo en una entrevista grabada en cinta que su abogado estadounidense le había dicho que Barrera había contratado a Fuentes León. El padre de Roy admite que los Barrera y la familia Fuente León han llevado una estrecha amistad a través de los años. El resultado de las investigaciones del Departamento de Justicia no ha sido revelado. En la prensa se rumora que Roy Barrera está esperando irse a Washington con George W. Pues tiene el ojo puesto en una posición dentro del gabinete. Los asistentes de Bush dicen que es prematuro hablar de eso, pero Texas está lleno de rumores. La Agencia de autos de Ernesto Ancira se espera llegue a los 600 millones de dólares en ventas este año. Ancira fue uno de los primeros en efectuar donativos para el comité de exploración presidencial de Bush, pero últimamente se ha mantenido detrás del telón. De manera sorpresiva, el Comité Nacional Republicano y la gente de campaña de Bush que trabaja por el voto hispano, dicen que nunca han oído hablar de Ancira. _Debe tener las raíces muy cortas_, me dijo uno de los portavoces. Bueno, no exactamente Ernie no puede dejar de involucrarse con personas que se meten en líos. Él es uno de los _pesados_ que pagó mil dólares en un evento de recaudación de fondos en septiembre para el Senador estatal Frank Madla quién se encuentra bajo investigación por un Gran Jurado Federal. Aparentemente Madla aceptó favores inapropiados de Eddie García _El rey del bingo_, asesinado en 1998 en lo que los fiscales llaman _un golpe de contrato_. El nombre Ancira volvió a surgir en agosto cuando el ex regente de la ciudad de México, Oscar Espinoza se convirtió en un fugitivo bajo una orden de arresto por malversación de fondos por 45 millones de dólares del dinero del pueblo. Periódicos mexicanos reportaron que fue visto por última vez bajo la protección de guardias armados proporcionados por los Ancira en Coahuila, Estado donde tienen su compañía. El patrocinador de Gus García, Anuar Name, ha sido calificado por las autoridades mexicanas como el socio de un ex gobernador que está huyendo por cargos entablados en su contra por haber aceptado pagos del cártel de Juárez. Justamente después de las elecciones de Julio en México, algunos miembros del partido triunfador, PAN, han clamado por que el país reabra las investigaciones del asesinato de Ruiz Massieu y las actividades de Manuel Muñoz Rocha en San Antonio. El investigador privado J. Alberto Villasana dijo al PAN en una carta con fecha de julio 15: _Creo que ya que Fox y el PAN han ganado, debemos estar conscientes de un asunto muy delicado: Pronto nos enfrentaremos a grupos criminales binacionales en los cuales las administraciones previas (México/Estados Unidos) han sido cómplices_. Actualmente en México ha habido un cambio de guardia, sin embargo, el presidente electo, Vicente Fox, nos ha hecho ver muy claro que la tendencia de la privatización masiva de industrias continuará a toda velocidad. Inclusive Robert Mosbacher ha insinuado que a él le gustaría que la compañía petrolera nacional PEMEX se apresure a privatizarse y que él podría tomar un trabajo en ella. Si Bush es electo, ha prometido que habrá una _relación especial_ con México. En su familia, la relación especial, ha estado ahí por mucho tiempo. Entonces _dice la lógica- si Ernie ha tenido algunos amigos y socios no placenteros ¿Qué con eso? Lo mismo va para el que se auto proclama _representante de Bush_, Roy Barrera. Siempre y cuando no haya tocado los bienes sucios él mismo, Bush se ha beneficiado de la influencia que tienen estos hombres para obtener el voto y promover el comercio. ¿Hace esto que Bush sea culpable por asociación? Si él no sabía de las conexiones con el cártel, probablemente no. (Llamé a la oficina de su campaña y pregunté si el gobernador sabía de estas relaciones y no recibí ninguna respuesta hasta antes de mandar a prensa este reportaje) Sin embargo se tiene que hacer la pregunta: Si nosotros que estamos muy lejos (en California) del territorio de Bush sabemos de estas conexiones, ¿cómo es que Bush no lo sabía? George W. Bush ha puesto en claro su avidez por el voto latino. _Si dices un millón, quiero que gastes dos millones. Si dices necesitar cuatro millones quiero que gastes ocho_, George W. le dijo a Leonel Sosa, director publicitario latino de su campaña. Lo que no está claro es ¿con quién está dispuesto Bush a asociarse para conseguir ese voto? Y si resulta ganador de la Presidencia, ¿cual es la naturaleza real de la relación especial que forjará entre nuestras dos naciones, Estados Unidos y México, en los próximos años? Mexicanos poderosos en el Dominion de San Antonio, Texas Moisés Saba Su propiedad fue financiada por el Laredo National Bank, el cual es propiedad de Carlos Hank Rhon. Moisés es hijo del financiero del PRI Isaac Saba, y uno de los hombres más ricos en Latino América. Inversionista en TV Azteca, la Segunda cadena de TV en México. Isaac Saba recientemente adquirió una gran participación de los negocios de los Ancira en México. Alonso Ancira Director General de Altos Hornos de México, S. A. (AHMSA) la más grande compañía acerera en México. Acusado de fraude con las empresas Fertimex y Carbón II. No hay cargos formales en su contra. Su propiedad en el Dominion fue transferida en diciembre de 1998 a una corporación de las Islas Caimán. Guillermo Ancira Director General de una compañía minera subsidiaria de AHMSA. Pagó en efectivo por su residencia en el Dominion. Carlos Ancira Hijo de Guillermo, pagó en efectivo por otra casa con Guillermo Ancira. Las escrituras se transfirieron a una corporación de las Islas Caimán en 1999. Los hermanos García Lourdes Uno de los hermanos encabeza la Asociación de Hoteles y Moteles de México. Pagó en efectivo Rodrigo Treviño Director de CEMEX, la tercera compañía más grande de cementos en el mundo. Héctor Burgos Acusado de fraude en la Bolsa. No hay cargos formales en su contra. Su socio, Eduardo Legorreta, ha sido encontrado culpable de múltiples delitos. Legorreta ha sido implicado con Enrique Fuentes León en Texas por lavado de dinero. No hay cargos formales. Rodolfo Zedillo Pagó en efectivo por su primera casa y acaba de construir otra casa en el Dominion. El hermano del presidente mexicano Ernesto Zedillo ha sido investigado por aceptar 8 millones de dólares de una compañía cuyos fondos provienen del cartel de Juárez. No hay cargos formales. Los Barones de la Energía Robert Mosbacher Sr. Inversionista, amigo de los Bush, tiene una firma de inversiones en la ciudad de México y está presionando para la privatización de PEMEX Rogelio Montemayor Inversionista, amigo de los Ancira. Cuando fue gobernador de Coahuila, fue acusado de haber invertido ilegalmente en una compañía de fertilizantes de Ancira. No hay cargos formales. Ex Director de PEMEX Rogelio Gasca Neri Renunció después de haber sido acusado de fraude mientras encabezaba la Comisión Federal de Electricidad mexicana. Aún se encuentra bajo investigación. Actualmente es el Cónsul mexicano en Austin. Su hijo Rogelio le vendió el Planeta México a Enrique Fuentes León. Enrique, su otro hijo había trabajado con Alonso Ancira. La familia le compró a Fuentes León una propiedad en el fraccionamiento Sonterra Fuentes Forbes; Andres Oppenheimer, Bordering on Chaos,: Mexico s Roller-Coaster Journey Toward Prosperity, 1998, Little, Brown and Company; Proceso magazine; El Financiero; The Washington Post; San Antonio Express News; Bexar County Deeds and Records Office and individual interviews. |
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| “Dime con quién andas y te
diré quién eres. Tell me who you side with and I will tell you who you are.” — “George W. Bush for President” web site |
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Cast of
Characters: Los amigos de los amigos
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by Julie
Reynolds Research assistance by Victor Almazán and Ana Leonor Rojo Those who say that George W. Bush has scant knowledge of foreign affairs don’t understand his family’s relationship with Mexico. If one event could be said to make that relationship visible, it had to be the state dinner given eleven years ago by President Bush for Mexico’s president, Carlos Salinas. It was an elegant yet boisterous gala, where the biggest movers and shakers in Texas and Mexico congregated and celebrated. This group was to become W’s Mexican legacy, a gift of ties and connections passed on from the father to his son. What was not visible was that the group included two men with numerous links to drug cartel figures. These men helped George W. Bush win the Latino vote in Texas. Which raises a few questions: How did these guys get into the Bush circle? What else do they do for him? And, to rephrase a famous query, what did the presidential candidate know and when did he know it? A glance around the fourteen tables at the 1989 dinner showed that pains were taken to arrange them so that no one appeared more important than the others. There was a smattering of celebrities — Anthony Quinn, Douglas Fairbanks, Jr., Barbara Walters and Larry King. Bush’s son Jeb and his Mexican wife Columba joined the soirée, too. The Mexican president had spent a long day with President Bush signing trade pacts, the precursors of NAFTA. Salinas brought his so-called Dream Team: his commerce secretary, finance minister, and his personal Machiavelli, Jose Córdoba. It would later be astounding to see, as the decade unfolded, how many of that administration’s proud men and women fell shamefully from grace — some exiled, some imprisoned and some assassinated. No one knew it then, but many at that banquet would survive to one day help young W beat a path back to the White House. There were loyal “Bushfellas” who were old friends of the family: Commerce Secretary Robert Mosbacher Sr., General Colin Powell, and George Bush Senior’s ever-present friend, Secretary of State James Baker. Gary Jacobs, whose Texas bank was about to be bought by the son of Mexico’s billionaire-politico Carlos Hank González, was also a guest. Tony Garza, then a young judge, is now a Bush cabinet contender. Today, all are advisors or contributors to W’s campaign. Hidden among the glitterati were two relative unknowns. They were, however, familiar to the group at hand. They were the loyal “Amigos de Bush” from San Antonio: criminal defense lawyer Roy Barrera Jr. and car dealer Ernesto Ancira Jr. In contrast to the Salinas group, the ties of Barrera and Ancira to drug cartels would remain unnoticed for another decade. Their ties to George W. would grow stronger. In the Name of the Father George Bush Sr. began his family’s relationship with Mexico in the 1960s, when his Zapata Offshore Oil Company was partner in a border-region oil company called Perforaciones Marinas del Golfo (Permargo), with Jorge Díaz Serrano. In 1988, the financial newspaper Barron’s reported that the two Jorges — Bush and Díaz Serrano — used prestanombres (“name-lenders”) to hide Bush’s investment in Permargo from the Mexican government, skirting Mexican foreign-ownership laws. Barron’s also accused the Securities and Exchange Commission of destroying related documents after Bush became vice president in 1981. Bush Sr. met Carlos Salinas’s father, Raúl Salinas Lozano, back when the latter was Mexico’s commerce secretary. The families’ friendship has continued through the years. Raúl Salinas, the president’s brother, has told investigators that Jeb and Columba Bush joined him three times for vacations at his hacienda Las Mendocinas. It was the same estate where he reportedly hosted an infamous 1990 party for the cream of Mexico’s drug cartels, which Jeb and Columba did not attend. Twelve years ago presidents-elect Carlos Salinas de Gortari and George Bush Sr. met in Texas in a meeting that was called “The Spirit of Houston.” “That meeting shaped the relationship between both countries for years to come,” Antonio Ocarranza, former Zedillo aide and president of the consulting firm Public Strategies Inc.(PSI) office in Mexico City told the Dallas Morning News. PSI is owned by several generous George W. Bush supporters, including Bush pioneer Roger Wallace. Today, as governor of Texas, George W. Bush has assumed the role his father once had as president. He meets regularly with Mexican officials, from President Zedillo to Secretary of Energy Luis Téllez, to discuss joint energy pacts and trade issues. “I’ve had foreign policy as the governor of Texas, and that is with Mexico,” George W. Bush said during the New Hampshire primary. While he is in public shaking hands, Bush’s friend Ernesto Ancira works backstage in the international energy sector. Which comes naturally: Ancira’s family and their partners practically own the energy business in Mexico. The Bushes, of course, know everyone in the oil business in the US. It’s a nice match, the Bushes and the Anciras. Let me make one thing clear: there is no evidence that Ernesto himself runs afoul of the law. Ancira is, rather, a point man in what Mexican journalist Juan Ruiz Healy calls “El Grupo Texano de George W. Bush.” He happens to have quite a few friends who are connected with drug cartels. In addition, there are some disturbing links between Ernesto’s group of friends in San Antonio and the assassination of Mexican politician José Francisco Ruíz Massieu. Since Ernesto has been a friend and a helper to the man who may be president, I believe they are connections worth exploring. “ERNESTO IS VERY FRIENDLY, very fun-loving,” a real estate agent told me as we cruised Ernie Ancira’s turf, “The Dominion,” a securely-gated San Antonio development where a number of Mexico’s elite have invested in million-dollar homes. Ernie, she said, loves to barbecue. Has money. Likes to socialize. Ernie — auto dealer Ernesto Ancira, Jr. — is one of San Antonio’s most popular and respected business leaders. Every year, he’s in the lists of top Latino entrepreneurs. Last April, his Ancira Enterprises Inc. made the number two slot — with $575 million in revenue — in Hispanic magazine’s list of the fastest-growing Latino companies. “My mother was paranoid about her kids’ success,” he once said. “It’s like there was a tremendous hurry to accomplish.” Truly a binational man, Ernesto Ancira Jr., was born in San Antonio in 1944, but spent his formative years close to his industrialist cousins in Mexico, who are in-laws of the Salinas family. In the 1960s he rose to become the top assistant to his mentor, Claudio X. González, one of the country’s most powerful businessmen. González later became President Salinas’s foreign investment advisor. Ancira’s family in Mexico has long been part of the power elite. The Ancira name is prominent in the city of Monterrey; that northern commercial center’s most elegant old hotel bears the name of Hotel Ancira. But in the 1970s, the Ancira family ran into problems back in Texas. Ernie’s father was implicated in a money laundering scandal at his company, San Antonio Foreign Exchange. The elder Ancira moved back to Mexico, but there he was named by US authorities as a participant in an $8 million tax fraud scheme. Ernie Junior, however, chose to return to Texas and prosper. In San Antonio, he hooked up with an ex-FBI agent and former city manager, Ralph Winton, and in 1972 they started a used car business together. Within a scant six years, Ancira bought out his partner, and Ancira Winton Chevrolet was earning $150 million and growing. Ernesto became a civic leader and a Republican heavyweight. He chaired the Alamo Bowl and still heads the Southwestern Bell PGA Golf Tournament. He was LULAC’s 1987 Empresario of the Year, and he received a MALDEF Corporate Responsibility Award the same year. And he met the Bushes. He co-chaired “Adelante con Bush” when George Senior ran for president, and along the way, he befriended George W. He is one of the folks George W. Bush’s people call his “100 closest friends,” a group that kicked off W’s presidential campaign last year with $1000 donations. Ancira learned to schmooze with politicians big and small, sometimes annoying local Republicans when he supported an occasional Democrat. He paid for a 1994 trip for Congressman Henry Bonilla to meet Mexican officials in Ciudad Victoria. Twice he bestowed travel gifts on Bush’s Commerce Secretary Robert Mosbacher, Sr. He reportedly piloted his Cessna to host airborne meetings so that Mosbacher and his Mexican counterpart, Jaime Serra, could privately discuss NAFTA. Young Ernie was a millionaire, a friend of the Bushes, and he was literally flying high. His family — movers and shakers all — would have expected no less. Early Cartel Connections As he developed business and political contacts, Ernesto Ancira also cultivated friendships with men connected to Mexican drug cartels. One of the first was financier Guillermo Ávila. As early as 1987, Ávila was part of an Ernesto Ancira troika, a flashy threesome-about-town starring Ancira, Ávila and developer Gustavo García. The three were often seen together in San Antonio in the late 1980s, until Ávila and his partners were busted for drug money laundering. Ernesto wrote to the US Attorney in the case and said that Ávila was a “responsible individual” who had a “positive impact on our community.” Their kids even went to the same private school. But Ávila and his partners had transferred $500,000 of supposed drug money — provided by a law enforcement sting — in and out of accounts in the US, Mexico, the Cayman Islands and the British Virgin Islands. In addition, Ávila owned an El Paso house that was raided in connection with the seizure of 21 tons of cocaine from his brother-in-law’s Sylmar, California warehouse, an all-time international record. The Juarez cartel’s Carlos Tapia Anchondo was living in Ávila’s home, and the drugs belonged to one of the cartel’s top men, Rafael Muñoz Talavera. When he entered the courtroom, Ávila winked at friends and family. But when the prosecutors played tapes of the defendants accepting “dirty” money, the party was over. Ávila was found guilty of conspiracy to launder monetary instruments on behalf of drug traffickers. Incredibly, he served a little over a year in prison. Afterward, he was banished from the US and moved to San Luis Potosí. The boss, Rafael Muñoz Talavera, was gunned down on a Juarez street in 1998. Ávila got off easy. He could credit his astute attorney, Roy Barrera Sr., whose son and partner Roy Jr. was a guest of the Bushes at the White House dinner. “Little Roy” is now a top-notch trial lawyer and a close Bush advisor. Though Roy Senior is a Democrat, Little Roy is a staunch Republican who has been in the trenches with W and Ernesto Ancira ever since they all campaigned for President Bush in the late 1980s, under the banner of “Adelante con Bush.” It was during those campaign years that George Junior bonded with many of his Latino allies in the state and made the friends he would later lean on when his political ambitions got into gear. By and large, the Latino alliances Bush touts so loudly these days are not social workers or school teachers, and they are certainly not working-class. Like most in W’s circle, they are Texas heavy-hitters who got rich from their astute blending of business and politics. Barrera Jr. quickly got close to the Bush family, and has stayed close. Both Bushes campaigned for him when he ran for state attorney general in 1986. In ‘88, he was part of a group of eight Bush allies called the “Victory Squad.” During the president’s 1992 campaign, Little Roy and Barbara Bush even teamed up and drove a mobile home from Austin to San Antonio to stump for the candidate. That same year, Barrera became head of the Bexar County (San Antonio) Republican party and has chaired it ever since. Once one of the youngest judges in Texas, Roy now fancies himself as Bush’s right arm. He recently passed business cards around at a national conference of credit unions, saying that he represented the governor’s office. Last winter, Barrera braved the ice with W to knock on New Hampshire doors before the primary, and this summer he was one of the few Latino delegates at the Republican National Convention. Ernie Ancira was among the friends and fans at Roy Jr.’s fortieth birthday bash at San Antonio’s Macaroni Grill, reported in detail by the San Antonio Express News. The group took turns roasting each other: handsome, charismatic Ernie almost stole the show from Roy. He was jokingly named “the new wet dream of the Republican party, Otto von Ancira,” by Republican Judge Tom Rickhoff. Roy and Ernie, both good-looking, became hot young GOP legends. They were touted as part of the “Republican Comeback,” said to embody the New Republican: young, wealthy and Hispanic. But old ghosts have repeatedly blocked the course of Little Roy’s political life. During Barrera’s ill-fated 1986 attorney general’s race, Vice President Bush hailed him as an “outstanding young Texan,” and said Barrera would “stand up to the drug pushers in our schools and in our state.” But the fact is, Roy has earned a slice of his income from the drug pushers’ bosses, and he’s done a decent job of keeping them out of prison, too. The Barreras, father and son, have a unique distinction: they are among Texas’s best narco-lawyers. And we’re not talking school-yard pushers. Along with Corpus Christi attorney Tony Canales, the two Barreras represent the cream of criminals from Mexican cartels when they have the bad fortune to get dragged before US courts. Among the choice clients the Barreras have defended are the Juárez cartel’s US “coordinator” Juan Chapa Garza (now serving thirty years for drug trafficking and money laundering), and Mario Alberto Salinas Treviño, a cocaine runner and alleged murderer, whom the FBI also links to the 1985 murder of Drug Enforcement Administration (DEA) agent Enrique Camarena. But there is one Barrera client who stands out as the most fantastic and treacherous of all: the “consigliero” of the Gulf cartel, Enrique Fuentes León. “There are going to be more deaths, eh?” Fuentes León, the cartel’s lawyer arrived in San Antonio in 1991, a time when, financially and politically, the Anciras were on top of the world. They were building their empire in Mexico under Salinas and in Texas under the Bushes. Enrique Fuentes León joined the Ancira and Gus García troika, replacing the now-exiled Ávila. It was during this time that Ernesto and his cousins began to invest in luxury real estate, and the others — the Mexican industrial elite — joined him. Ernesto got in on the new gated golf course development north of San Antonio, The Dominion, where Guillermo Ávila once sat on the board, and Ernie still sits. Behind the imposing stone arch, the Ancira family’s neighbors are a who’s who of Mexico’s corporate and government power structure. The Zambrano-Treviños of the giant cement firm CEMEX bought property there, as did the head of Mexico’s Hotel-Motel Association and half a dozen other big shots. Many of them paid cash. Even the new President of Mexico’s brother, Rodolfo Zedillo, bought his Dominion house for cash in October 1994, right around the time he started an $8 million business deal funded by the Juárez cartel. But by far the biggest piece of acreage in Dominion was bought by Enrique Fuentes León, a fugitive sought in Mexico for bribing judges on behalf of a rich Acapulco playboy who raped, tortured and killed a six-year old girl. Fuentes León fled to Chile, then Argentina. Then he arrived in Texas with a visa that said he was an investor. Invest he did. Fuentes León bought some one hundred-plus acres in Dominion in the early 90s, and he soon acquired over $6 million in San Antonio real estate. The DEA reportedly grew interested in him when he represented Gulf “capo” Juan García Ábrego in a Matamoros trial. Though he was still wanted in Mexico, Fuentes León somehow traveled in and out of the country often, using brand-new Mexican passports. A law enforcement investigator in charge of Fuentes León’s arrest told me that Ancira sometimes flew Fuentes León in his private plane, but Ancira says he never met him. The investing continued. In 1993, Fuentes León, and a group of investors attempted to purchase the San Antonio Light newspaper, but the Hearst Corporation — or perhaps the Justice Department, which usually looks into major newspaper sales — never accepted the offers. Fuentes León did buy the popular disco Planeta Mexico owned by Ancira’s friend in the energy sector, Rogelio Gasca Jr. A new partner, Manuel Pacheco, came in on the deal but was later arrested and given a fifteen-year sentence for money-laundering. With his visa about to expire, Fuentes León made fruitless pleas to America’s high and mighty — including George W. Bush, who called his father, the president, on Fuentes León’s behalf (see El Andar Winter ‘99). Fuentes León was finally arrested, and attempted bribery and drug money-laundering charges were ready to be filed against him, too. The Barreras took the case. At the hearing, a remarkable tape was played, recorded while Fuentes León arranged to bribe an undercover INS agent. The tape was made in the summer of 1994, a few months after the assassination of presidential candidate Luis Donaldo Colosio. Fuentes León bragged that his son Enrique, also a lawyer, was “one of Zedillo’s people.” In a moment of bravado, Fuentes León told the INS agent, “I know how they killed Colosio.” And he said something even more chilling: “In the end, in August... there are going to be deaths and all that shit, eh? ... There are going to be more deaths.” And so it was: José Francisco Ruíz Massieu, the Guerrero governor who had wanted Fuentes León to face charges in Mexico, was assassinated soon after. El Financiero columnist Jorge Fernández reported that Ruíz Massieu was scheduled to be killed in August, but because of a problem with one of the would-be hit men, the event actually took place in September. Raúl Salinas, the president’s brother, was eventually convicted for authoring the murder. Immigration and Naturalization Service (INS) agents insisted that another man wanted for orchestrating the assassination’s logistics was with Fuentes León moments before his arrest in San Antonio. The man, Manuel Muñoz Rocha, simply walked away, because at the time the agents didn’t know he was a fugitive with a $1 million price on his head. The INS official in charge of the arrest, Gary Renick, says that all three agents who were present separately identified Muñoz Rocha from photos. Now retired, Renick still says he is convinced that Muñoz Rocha was present at Fuentes León’s arrest. An employee of Fuentes León then testified she overheard her boss talking with a man she was sure was Ernesto Ancira’s friend Gustavo García, just a few days after the murder occurred. The employee said that she believes she heard the men talk about the murder and she is sure that they said they needed to send more money to “Muñoz.” The DEA has reportedly found that a top drug enforcement officer on the Gulf cartel payroll met with Fuentes León and Muñoz Rocha in a “city in the United States” a few weeks before the killing. And an FBI report noted that one witness told agents that Fuentes León “has a lot of information about Ruiz Massieu.” Manuel Muñoz Rocha disappeared at the very moment of Fuentes León’s arrest, and was never officially seen again. But one curious footnote to his San Antonio stay lingers: Muñoz Rocha’s visa, which he used to enter and leave the US a few weeks before and after Ruiz Massieu’s assassination, listed a conspicuous address: “The Dominion, San Antonio.” Gus García: The Third Man With the third member of Ancira’s San Antonio troika, developer Gustavo García, the Grupo Texano became a multinational operation. García has been under investigation by the DEA for cocaine trafficking in Florida and Venezuela, and by local police for money laundering in San Antonio. He has not been charged. He’s head of the Brita water purification franchise in Mexico, and he owns around a hundred million dollars’ worth of San Antonio real estate along with his partner, Lebanese-Mexican businessman Anuar Name (pronounced nah-may). The only visible sign of Name’s presence in San Antonio is the gleaming office tower he and Gus García own together. The Mercantile building is an impressive, mirrored ribbon of a building, and García wanted to buy it for several years but couldn’t come up with the money. Then, after a lengthy trip to Mexico, he returned victorious, representing Anuar Name, a multi-million-dollar financier of the Salinas campaign. Name, too, had blemishes on his reputation, but they weren’t well-known. Newspapers reported that Name co-owned a Tijuana disco together with a member of the Caro-Quintero drug cartel of Sonora. Name is also an associate of Egyptian arms dealer Adnan Khashoggi, a friend of Raúl Salinas, and a partner of PRI king-maker Carlos Hank González, whose family has been investigated in the US, Costa Rica and Mexico for links to drug cartels, murder and money laundering (See El Andar Summer/Fall ‘99). García bought the Mercantile building for Anuar Name in February 1992 for $5 million — in cash. “I have some major tenants looking at it,” García told reporters. Soon after, Name’s friends the Hank family moved in, leasing the entire ground floor for Carlos Hank Jr.’s Laredo National Bank. There, too, Ernesto Ancira installed campaign headquarters for his 1992 run for Texas State Senator. Anuar Name’s circle also includes Joseph Audi, of the Lebanese Bank Audi, a “private, personal bank” with branches in Beirut, Geneva, Paris, Luxembourg and New York that has been involved in a multi-million dollar arms running and money-laundering scandal. The bank was not charged, but a $6 million account was frozen and one of its depositors was charged with arms running and money laundering. In late 1993 and early 1994, Name and García re-financed their building several times over (for $1 to $5 million each time), a large part of which came from none other than Name’s friendly neighborhood banker, Bank Audi. But Bank Audi has a more auspicious claim to fame: its Geneva branch was the issuing bank of a $599,985 payment that made its way through several banks until it landed in an account belonging to Manuel Muñoz Rocha and a hit man convicted in the assault that killed Jose Francisco Ruiz Massieu. Investigators have never determined who owned that original account in Bank Audi. The Amigos de Bush Ernie and Roy Barrera campaigned for President Bush in 1992, and they celebrated what looked like an easy re-election with George W at a “Super Tuesday” rally for the Texas primary. Ancira also thought he was a shoo-in in his run for the state senate, especially when both Bushes came out to campaign for him. George W. optimistically greeted Ernie as “Mr. Senator” well before the election took place. But Ernesto and President Bush lost on the same depressing day in November, 1992 — Ancira lost the state senate and Bush, the presidency of the United States. 1994 was a turbulent year for the Grupo Texano. Things happened quickly, and so dramatically that the scene was brutal, intoxicating. NAFTA, the jewel in the crown of all involved, from Salinas to the Bushes to Mosbacher to the Anciras, became reality on January first. The same day, Zapatista rebels declared war on the Mexican government, followed by bloody massacres and international outcry. By fall Mexico had suffered the assassinations of Colosio and Ruiz Massieu. Ernesto Zedillo — a Yale man just like the Bushes — was elected President. Then the peso collapsed. Lucky for them, most of Mexico’s wealthy class had already put their money into dollar-based investments — such as San Antonio real estate. So things were looking up, especially after George W. was elected. The Bush for Governor campaign was easy. The Amigos de Bush — W’s Latino support group — rallied heavily for their man. Bush’s people were elated that he had garnered 29 percent of the Latino vote, approaching the record 38 percent Roy Barrera had earned in his bid for state attorney general. Back in that 1986 race, both Bushes had stumped for Barrera, holding “Voy Con Roy” barbecue fundraisers and rallies. In ‘94, Roy was more than happy to return the favor and celebrate George W’s victory, and especially his coup with the Hispanic vote. After all, Roy and the “Amigos” helped him win it. Ancira, another “Amigo de Bush,” was feeling good, too. He was rewarded with two Bush appointments: first to the Texas State Workers Comp Board, then to a coveted advisory board position at the University of Texas School of Business. George W.’s influential friend James Leininger gave Ernie a board position in his new conservative think tank, the Texas Public Policy Foundation. Almost immediately, Governor Bush had to tackle a problem presented by Ernesto’s young cousins from Mexico. The Anciras had teamed up with an old school chum, pharmaceutical heir Xavier Autrey, during President Salinas’s privatization free-for-all of the late 1980s. The “A” kids maneuvered six million dollars of other peoples’ money into billions, buying up mining and energy companies, as well as Mexico’s largest steel company, Altos Hornos de Mexico (AHMSA). Soon their companies were accused of being fronts for the drug trade, and were described as such by analyst R.C. Whalen at a 1993 US congressional hearing. Together with a secretive binational strip-mining operation called Dos Republicas, the Anciras tried to get a Tex-Mex energy deal going by re-vamping a decrepit coal-burning power plant on the border, named Carbon II. They convinced the World Bank, Citibank and Southern California Edison to invest over $250 million in the project. It was a disaster. The Anciras’ reputation sank as fast as a rust-eaten bucket, and partners and investors began to look for ways out. The Ancira family was accused by shareholders of wasting extraordinary amounts of money on corporate jets, limousines and other luxuries. Not to mention their extensive purchases of San Antonio real estate. Just last year, while the company amassed nearly $2 billion in debt and had to suspend payments, the Anciras began quietly moving property titles to Cayman Island holding companies, with the help of their front man Marcelo Sánchez. Carbon II should have been the kind of project Governor Bush would have embraced: a model energy venture between Mexico and the US. But as environmentalists’ complaints about air pollution grew louder, Bush’s comments grew guarded. By the time of the project’s final demise in 1995 — due to mismanagement as well as the fact that its approval by Salinas had been blatantly illegal — Bush was given credit for heeding environmental concerns. By the time his 1998 re-election rolled around, W was already said to be working on his run for the White House, and in Texas he once again relied on the Latino vote. He was also working to strengthen energy ties with Mexico. That fall, he held a press conference with Mexico’s Secretary of Energy Luis Téllez. Together they promised a new era in which Texas and Mexico would essentially erase the border and create a “common market” for gas and electricity production and consumption, as well as an integrated electrical network. One month later, with help from the Amigos de Bush, George W. surpassed Roy Barrera’s record and pulled in a hefty 39 to 49 percent of the Latino vote. He won in a landslide. He was already counting on the Republican presidential nomination. Still Running with Wolves It’s been a wild ride since the 1989 White House dinner. Bush Sr. lost the presidency, and he and his wife Barbara are now campaigning for their son. Carlos Salinas is self-exiled in Ireland and Cuba. His brother Raúl is in prison. This year, Roy Barrera Jr. is on the campaign trail with W. He has “rumbled,” say the papers, about running for governor. But the shadow of past relationships continues to haunt him. Last year, Barrera Jr. landed in the hot seat. He represented millionaire Allan Blackthorne after the contract-style murder of Blackthorne’s ex-wife, Sheila Bellush. The case made national headlines because Bellush was stabbed to death in front of her toddler quadruplets, and they crawled in her blood until they were found. The hit man, José Del Toro, fled to Mexico and was represented by none other than Barrera’s old Gulf cartel client, the prestigious office of Enrique Fuentes León. Barrera was dropped as Blackthorne’s lawyer, and the US Justice Department began investigating who paid Del Toro’s presumably high-priced legal bills. Del Toro said, in a taped interview, that he was told by his U.S. lawyer that Barrera had hired Fuentes León. Roy’s father admits that the Barreras and the Fuentes León family have remained close through the years. The Justice Department’s findings have not been revealed. Roy Barrera, however, is rumored in the press to be hoping for a ride with W. to Washington, his eye on a cabinet position. Bush aides say it’s premature to talk about it, but Texas is all a-buzz with murmurs. ERNESTO ANCIRA’S car dealership is expected to top $600 million in sales this year. Ancira was one of the first to donate to Bush’s presidential exploratory committee, but lately has remained behind the scenes. Surprisingly, the Republic National Committee and Bush campaign people in charge of Hispanic outreach say they’ve never heard of Ancira. “He must be very grass roots,” a spokesperson told me. Well, not exactly. Ernie can’t stop getting involved with guys who get in trouble. He’s now one of the “heavy hitters” paying $1,000 each to host a September fundraiser for State Senator Frank Madla, who is under investigation by a federal grand jury. Apparently Madla accepted inappropriate favors from Eddie “The Bingo King” García, murdered in 1998 in what prosecutors called a contract hit. The Ancira name surfaced again in August when former Mexico City mayor Oscar Espinosa became a fugitive, under an arrest warrant for embezzling $45 million of the people’s money. Mexican newspapers reported he was last seen under the protection of armed guards, provided by the Anciras in their company town in Coahuila. Gus García’s patron Anuar Name has been named by Mexican law enforcement as the business partner of a ex-governor running from charges of taking Juárez cartel payoffs. RIGHT AFTER MEXICO’S July elections, some members of the winning PAN party have clamored for the country to re-open investigations into the assassination of Ruiz Massieu and Muñoz Rocha’s activities in San Antonio. Private investigator J. Alberto Villasana told the PAN president in a July 15 letter, “I believe that since Fox and the PAN have won, we should be aware of a very delicate matter: we will soon be facing binational criminal groups to which the previous administrations have been accomplices.” In Mexico today, there is a changing of the guard. But president-elect Vicente Fox has made it clear that the trend toward massive privatization of industries will continue at full speed — even Robert Mosbacher has hinted he’d like the national oil company Pemex to hurry up and privatize, and he might like a job there, too. If he is elected, Bush has promised there will be a “special relationship” with Mexico. In his family, the special relationship has long been there. So — goes the logic — if Ernie has a few unpleasant friends and partners, what of it? Ditto for Bush’s self-proclaimed “representative,” Roy Barrera. As long as he hasn’t touched the dirty goods himself, Bush has been able to benefit from these men’s vote-winning and trade-promoting influence. Does this make Bush guilty by association? If he didn’t know about their cartel connections, probably not. (I called his campaign office and asked if the Governor knew about these relationships, and did not receive a response by press time.) But the question has to be asked: if some of us far outside of the Bush camp know about those connections, how come Bush didn’t? George W. Bush has made his lust for the Latino vote clear. “If you say a million, I want you to spend two million. If you say you need four million, I want you to spend eight,” W told Lionel Sosa, head of the Bush Latino media campaigns. What is not clear is who Bush will be willing to consort with to earn that vote. And, if he wins the presidency, what is the true nature of the special relationship he will forge between our two nations, the US and Mexico, in the coming years?  Julia Reynolds is the editorial director of El Andar. © 2000 El Andar Media Inc. |
miércoles, 1 de febrero de 2012
LOS AMIGOS DE BUSH
Friend of
George and Laura Bush, co-chair Adelante con Bush, Bushes (Jr. and Sr.)
campaigned for him in 1992 State Senate run. On board of The Dominion.
Roy Barrera Jr.
Massieu. Was paid $500,000 by check issued from Bank Audi,
Geneva. Last seen in San Antonio with Enrique Fuentes
León.
. In
another case, was fined last spring by FEC for violating campaign finance
laws.
, NOT
CHARGED. Now self-exiled in Ireland and/or
Cuba.
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